Con más de 50 años de carrera a sus espaldas, Richard Long sigue siendo considerado uno de los artistas contemporáneos más innovadores e influyentes del siglo XX y XXI. Fue en el año 1967, cuando gracias a este artista, se crea por primera vez un antes y un después en la noción de percepción espacial artística en relación con la naturaleza y su entorno.
Es a través de su obra temprana titulada “A Line Made by Walking”, y rompiendo la relación entre arte y objeto, como Richard Long muestra a través de una fotografía el discurrir de un camino dejado por unos pies en la hierba. En este preciso momento, el arte como acción, tomaba una nueva dimensión, una dimensión espacial que le llevaría a establecer nuevas relaciones con el propio entorno. Este carácter nómada y activo persiste a lo largo de todo su trabajo junto con conceptos como viaje, tiempo, espacio o distancia, temas fundamentales para desarrollar y comprender la magnitud de su obra.
© RICHARD LONG - Six Stone Circles - London 1981
Fue en la década de los 80, cuando Long comenzó a hacer una serie de obras en las que utilizaba materiales del entorno como el barro, la pizarra, la madera flotante, huellas o piedras, elaborando así, sus monumentales esculturas de líneas y círculos. Más allá del carácter primitivo, en cuanto a las formas empleadas en su trabajo, Richard Long profundiza en la relación entre la experiencia humana y el propio entorno. Es a través de montañas, desiertos, costas, ríos o paisajes nevados, como elabora una serie de obras en armonía con la naturaleza y que buscan a través de formas simples representar determinados símbolos arquetípicos que rodean desde siempre al ser humano.
Como el propio artista afirma, “el significado de su obra radica en la visibilidad de sus acciones y no en la representación de un paisaje en particular”. Estas obras ambientales realizadas por todo el mundo y de carácter activo y efímero, son siempre documentadas por Long con textos, mapas y fotografías que le ayudan a crear una potente narrativa.
© RICHARD LONG - Turf Circle, Krefeld, Germany 1969
Sus largos paseos por parajes silvestres dan como resultado el gran “corpus” de su obra. Ante el interés que comenzaba a suscitar su trabajo, Long se vio obligado a reflexionar sobre la relación que existía entre su caminar libre y la posibilidad de exhibir su trabajo en una galería de arte. El sentido de trabajar directamente en los entornos, con materiales del lugar, se contraponía a la idea de convertir aquello en un objeto, para descontextualizarlo y ser presentado en un espacio cerrado. Para ello tuvo que utilizar diferentes modos de presentación para poder llevar su experiencia de la naturaleza a los museos y galerías.
En la actualidad su trabajo se puede ver en la galería alemana Konrad Fischer Galerie en Berlín, hasta el 27 de julio, en una exposición donde se presentan las últimas obras realizadas por el artista británico.
Eduardo Álvarez | Madrid | 21 de Mayo 2019